El gobierno bonaerense no consiguió el aval del 75 por ciento de los tenedores del bono BP21 a la propuesta para prorrogar hasta mayo un vencimiento de capital que la Provincia debía afrontar en los próximos días por 250 millones de dólares. Por eso, la administración de Axel Kicillof decidió estirar hasta fin de mes las negociaciones con los acreedores en procura de evitar el default.

Así, hasta el 31 de este mes correrá el plazo para que los tenedores del bono den consentimiento a diferir el pago del capital hasta el 1 de mayo. Ayer fuentes del gobierno provincial reconocían que la falta de acuerdo obedeció a que los fondos que agrupan a un grupo mayoritario de bonistas pidieron más tiempo para analizar la oferta oficial. En cambio, decían que se había logrado el consentimiento de los pequeños bonistas.

La resolución del gobernador Axel Kicillof se conoció luego de que un grupo de inversores diera a conocer un comunicado donde criticó la falta de tiempo y cuestionó la ausencia de definiciones sobre el plan económico.

Un comité internacional de acreedores de esos títulos formado en Nueva York había criticado la propuesta de Kicillof de reprogramar ese vencimiento. “La Provincia ha llevado a cabo la solicitud de consentimiento en un plazo truncado, sin el beneficio de un proceso formal de identificación de tenedores de bonos, y sin un plan integral”, advirtieron quienes representan a tenedores con posiciones en títulos bonaerenses. Pese a las críticas, sostuvieron que siguen en carrera para “entablar negociaciones de buena fe sobre la base de un plan económico sólido e integral”.

Fuente: El Día