“En el Concejo Deliberante no se puede hacer lo que cada uno quiere porque es una actividad reglada, que tiene normas”.
Lo enfatizó esta mañana en diálogo con Radio Altos el exedil y excandidato a intendente Raúl Woscoff.
Si bien dijo que no sigue de manera cotidiana lo que ocurre en el ámbito deliberativo, sí contó que sintió pena que el conflicto en La Libertad Avanza haya escalado a tal nivel que hubo presencia policial en Sarmiento 12. “Que el cuerpo deliberativo trascienda por un episodio policial cuando debe serlo por los hechos políticos que genera, me causó cierto pesar y lástima”, expresó.
Recalcó que la actividad del Concejo está especificada en la Constitución provincial en el segmento de régimen municipal y además existe un reglamento interno que fija circunstancias y condiciones en las que se deben desarrollar las funciones de las y los concejales y sus intervenciones en los bloques.
“No se pueden vulnerar graciosamente esas normas y generar, por razones de carácter político externo, referencias, pertenencias, nuevas asociaciones políticas”, aseveró en relación a la decisión de Valeria Rodríguez, Marcos Streitenberger y Silvina Rubio de dejar los bloques por los que ingresaron al cuerpo y sumarse al de La Libertad Avanza.
“Esa forma tan lábil y esas fronteras tan difusas que algunos consideran como un mérito, yo entiendo lo contrario: esto obedece a que las identificaciones son personales y no con los partidos”, opinó.
En ese punto, hizo hincapié en que la democracia es de partidos políticos y agregó que los problemas comienzan a aparecer por el debilitamiento de esos partidos. “La debilidad que genera no tener partidos organizados y fuertes, provoca este tipo de entradas y salidas, que tendrían una solución práctica en la constitución de sub- bloques”, planteó.
Y remarcó que quien se escinde de una bancada no puede conformar otro espacio y reclamar para sí las características propias que le asignan en el reglamento al bloque, como es personal o espacio individual propio, entre otros.
“Por la falta de subordinación política a un partido cada uno entiende que luego de una elección puede rumbear para distintos lugares conforme a los intereses políticos de cada uno. A mí me parece que ahí es donde comienzan a disolverse lamentablemente los límites y se genera este tipo de situaciones complicadas”, opinó.
Recalcó que en el caso de La Libertad Avanza que no tiene la base y estructura de un partido político organizado y por eso “es más fácil que se den estas situaciones irregulares”.
Insistió en que el funcionamiento del Concejo Deliberantedebe responder a la Constitución provincial, a la ley orgánica de las municipalidades y al reglamento interno. “Eso hay que conocerlo bien, hay que respetarlo”, manifestó.
Woscoff planteó que la capacidad institucional del Concejo se nutre de muchos aspectos formales y otros no tan formales, como por ejemplo, el partido político que ha triunfado en las elecciones “tenga la cabeza del órgano deliberativo”.
En ese punto, no dudó en aseverar que hoy la presidencia del deliberativo la tendría que ejercer un representante de Unión por la Patria y no María Teresa Gonard, concejal de La Libertad Avanza.
“El sistema se nutre de aspectos formales y algunos no formales. En el afán legítimo, a veces, de sumar espacios políticos y demás, puede llevar a tomar decisiones que empiezan a resentir el normal funcionamiento del Concejo. La materia prima con la que trabaja el Concejo no son los concejales y sus problemas, sino los problemas de la gente. Ese cambio genera un deterioro en la visión externa que tiene cualquier vecino sobre el funcionamiento del deliberativo”, analizó, por último.
Fuente: Frente al Cano.