Por impulso de la diputada provincial María Fernanda Bevilacqua, el Frente de Todos presentó en la Cámara Baja bonaerense su propio proyecto de autonomía municipal. De esta forma, ya son tres las iniciativas que están bajo análisis en la Legislatura bajo las firmas de referentes políticos del FdT, el Pro y la UCR de la Sexta Sección Electoral.
“Presenté el proyecto en 2020, pero como no fue tratado se terminó cayendo a fines del año pasado. En estas últimas semanas se efectuó la reproducción de la iniciativa, por lo que recuperó estado parlamentario. Esperamos que esta vez sí encuentre consenso”, dijo la legisladora del FdT a La Nueva.
Bevilacqua consideró que su proyecto “tarde o temprano se cruzará con las otras iniciativas en danza y se efectuará una unificación”, posiblemente en alguna de las comisiones en que sea tratado.
“Lo importante aquí son dos aspectos: el primero, que la ley salga; y en segundo lugar, que por primera vez hay diputados y senadores de distintos partidos pidiendo avanzar hacia la autonomía municipal”, subrayó.
El proyecto de Bevilacqua impulsa, como eje central, el principio de suficiencia económica.
“Si los municipios no reciben los recursos que necesitan, pensar en autonomía es imposible. ¿Y esto qué implica? Que la Provincia transfiera los recursos necesarios a los estados municipales para afrontar el costo de todos los servicios que le viene delegando desde hace años”, explicó.
“No puede haber traslado de responsabilidades sin el correspondiente traslado de partidas”, dijo.
Para Bevilacqua, hay que reformar el sistema y que los recursos se distribuyan a los municipios, dado que “son el estamento de gobierno que está cara a cara con los vecinos y debe resolver los problemas de la gente”.
“No tiene sentido que los intendentes deban rogar la llegada de recursos; el sistema de transferencia debe ser automático, a fin de dar rápida respuesta a las necesidades de la gente”, añadió.
La legisladora insistió en que, mientras los jefes comunales tienen como “actividad diaria” tomar decisiones en relación con las demandas de la sociedad, no cuentan con competencias ni recursos suficientes para ello.
“En este aspecto no resulta sano que la estructura tributaria se encuentre invertida y alejada de la base de decisión”, expresó. En otras palabras: no es justo que la Provincia y la Nación recauden, mientras la mayoría de los reclamos sociales deben ser atendidos por los intendentes.
“Así la mitad de los esfuerzo de un intendente se gastan en gestionar la benevolencia de otros niveles de gobierno, para que financien alguna obra, o recibir un aporte del Tesoro para cerrar los presupuestos municipales”, lamentó.
“Los pactos fiscales que se han suscrito hasta la fecha, de hecho, han tenido un único ausente: los municipios”, agregó.
Bevilacqua hizo hincapié en que los municipios deben poder dictar su propia carta orgánica y designar a sus propios órganos de control.
“Esto es ni más ni menos que lo que hacen otras provincias”, enfatizó.
Más recursos y cambios a la ley electoral
El proyecto de ley propone modificar la Ley Orgánica de las Municipalidades (6769/58) y el Decreto Ley Orgánica de los Partidos y Agrupaciones Municipales (9889/82), pero también incorpora cambios a la Ley Electoral (5109).
Contempla, como primera medida, que los municipios con más de 20 mil habitantes puedan dictar su propia carta orgánica “para su gobierno, sin más limitaciones que las establecidas por la Constitución”.
A partir de allí, los concejos deliberantes podrán sancionar ordenanzas referidas a todos los temas “que no sean competencia propia de la Provincia o la Nación”.
En este marco, los CD podrán crear “impuestos y tributos” de distinta índole (desde fraccionamiento de tierras hasta licencias de caza y pesca con fines comerciales, entre otras), siempre contemplando lo límites fijados por la Constitución.
Al momento de definir el presupuesto, además, deberán “cuantificar los montos erogados para la cobertura de servicios y tareas de competencia provincial, nacional o de concesionarios privados”, a fin de comunicarlo al responsable del pago y, eventualmente, “perseguir el cobro mediante la vía de apremio”.
La iniciativa de Bevilacqua también estipula que en todas las elecciones -ya sea primaria o general- se utilizará la boleta única en soporte papel.
Allí se asignará un mismo espacio a todas las agrupaciones políticas y los candidatos o precandidatos oficializados. Los votantes sólo tendrán que marcar la opción de su preferencia rellenando un casillero en blanco.
El proyecto también divide a la provincia de Buenos Aires en 11 secciones electorales (actualmente son 8).
El número de diputados variará en función de la población de cada jurisdicción (entre 3 y 16), pero el de senadores será idéntico (4 en todos los casos).
De esta forma, todas las regiones tendrán el mismo número de representantes en la Cámara Alta.
Fuete: La Nueva.