El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, asumió ayer por la tarde su segundo mandato consecutivo al frented e territorio bonaerense.
En el acto, estuvo acompañado de Cristina Kirchner, su vicegobernadora Verónica Magario y el flamante presidente de la Cámara de Diputados, Alejandro Dichiara.
Kicillof primero habló ante la Asamblea Legislativa y luego dio un discurso en la plaza San Martín en La Plata dirigido a la militancia.
En su locución, enfatizó en los errores de la derrota Nacional del peronismo y dejó varias advertencias para el Gobierno del presidente Javier Milei.
Las principales frases de Kicillof contra Milei
“Estamos obligados a decirlo: pese a todas las dificultades, los bonaerenses evaluaron que lo que falta en materia de vivienda, de educación, de salud, de infraestructura, no se consigue ni con motosierra ni con ajuste”.
“Viva la justicia social, carajo”.
“A nivel nacional, las elecciones las ganó una orientación que no es la nuestra. Pero lo cierto es que no tenemos que gobernar solo para una fuerza provincial”.
“No soy el gobernador de una isla. Soy gobernador de casi el 40% de los argentinos cuya calidad de vida depende en mucho de lo que haga o deje de hacer el gobierno nacional”.
“Las propuestas de la fuerza que ganó no conducen ni a una mejor sociedad ni a una mejor economía”.
“Nos tocará convivir con un Gobierno Nacional cuyas prioridades no compartimos, pero cuya legitimidad popular respetamos. En varios aspectos, las propuestas están en las antípodas de nuestra manera de ver la vida y mundo”.
“Pedimos también que se respete la voluntad de la mayoría de los bonaerenses que respaldaron masivamente un proyecto de desarrollo, inclusión, defensa de derechos, que es el que llevaremos adelante en la provincia de Buenos Aires”.
“La sociedad no votó en venganzas ni sacrificios, la sociedad aspira a un tiempo de recuperación que les tocará liderar”.
“Tengan la certeza de que la mayoría de los argentinos no eligió la caída de los salarios, la destrucción de la producción y el empleo de la industria nacional, y menos todavía el perdón a los genocidas o la privatización de la educación y la salud pública”.
“La dignidad no es un negocio. Los derechos no se miden por las ganancias económicas. La solidaridad no es ni cálculo ni transacción”.
“La libertad solo es posible si hay igualdad. La vida no es un mercado. Y la patria no se vende”
Fuente: NA