Los abogados de la querella de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner reclamaron este miércoles ante la Cámara Federal porteña que la jueza María Eugenia Capuchetti sea apartada de la investigación por el intento de asesinato de la exmandataria y denunciaron que si les fue frustrada “la posibilidad de la prueba” pudo haber sido para ocultar algo.
“Si nos frustraron la posibilidad de la prueba es porque había gato encerrado”, expresó el abogado José Manuel Ubeira en la audiencia ante el juez de la sala I del tribunal de apelaciones Leopoldo Bruglia, quien ahora deberá decidir si sostiene o aparta a la magistrada que instruye el expediente por el intento de magnicidio ocurrido el 1 de septiembre.
En la misma dirección, al salir de los tribunales federales de Comodoro Py, el letrado expresó que “si seguimos investigando llegamos a donde no quiere llegar, a las terminales del PRO” y luego refirió que existe en la causa una pista vinculada al diputado nacional de Juntos por el Cambio, Gerardo Milman, además de “un discurso de odio de determinados lugares”.
Para los abogados de la querella, la jueza Capuchetti mostró una “completa falta de iniciativa” y habría “boicoteado” líneas de investigación, por lo que no puede seguir al frente del caso, según expresaron en la audiencia, en la que primero intervino el abogado Marcos Aldazabal (que enumeró las irregularidades en el manejo de la causa) y luego Ubeira.
Las diferencias entre la jueza y la querella se volvieron insalvables a partir de la decisión de la magistrada de no hacer lugar al secuestro del celular de las asesoras de Milman que declararon como testigos en la causa y negaron primero haber estado en el bar Casablanca el 30 de agosto para luego corregirse cuando les fueron exhibidas imágenes que acreditaban su presencia.
“Si queremos enderezar el rumbo de este asunto, apartar a Capuchetti podría ser el comienzo”, dijeron los querellantes durante la audiencia entre el juez Bruglia, al que además le aclararon que no reclaman “resultado concreto” para la investigación, sino que quieren “que se investiguen todas las líneas para conocer qué pasó”.
La audiencia, que estaba fijada desde la semana pasada, se realizó luego de que el martes la querella reclamara que se amplíe la indagatoria y se procese por asociación ilícita a Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo y se ordenen de forma urgente nuevas medidas de prueba, tras detectarse una seguidilla de mensajes de Whatsapp que darían cuenta del accionar organizado de la banda.
“Recordá esta fecha”, “Esta hdp (sic) ya está muerta”, “No sabés que hicimos con esto”, “Generar miedo”, “Para que el gobierno sepa con quienes se están metiendo”, son algunos de los mensajes hasta ahora desconocidos y enviados desde el celular de Carrizo, jefe del grupo de supuesto vendedores de copos de nieve para el que trabajaban quienes agredieron a la vicepresidenta, según surge de la presentación de la querella.
Fuente: Télam