Así lo acordó la ministra de Salud Carla Vizzotti con sus pares provinciales. La prioridad: completar los esquemas de inmunización de las personas mayores de 40 años y de 18 con condiciones de riesgo.
Ante los riesgos que supone la aparición de la variante Delta de coronavirus, el Gobierno consensuó con las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires acelerar la estrategia de vacunación para completar los esquemas de las personas mayores de 40 años y los que tengan entre 18 y 59 años y presenten condiciones de riesgo. La decisión se complementará con un sistema de búsqueda activa de la población priorizada que aún no se inmunizó contra el COVID-19.
A esta última practica se la define como estrategia extramuro, por ejemplo, la visita casa por casa de todas estas personas. Los detalles de estos cambios fueron acordados por la ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti en una videoconferencia con sus pares provinciales en base a un estudio técnico realizado por la Comisión Nacional de Inmunizaciones.
“Después del análisis de los expertos de la CONAIN y el análisis de la evidencia científica destacamos que la estrategia que estamos llevando adelante es adecuada y está teniendo resultados satisfactorios”, indicó Vizzotti, pero luego agregó que la idea es acelerar el ritmo de vacunación de segundas dosis.
Vamos a redoblar los esfuerzos para completar todos los esquemas de vacunación, principalmente en mayores de 40 años, y personas entre 18 y 59 años con condiciones de riesgo, realizar acciones de búsqueda activa para vacunar a quienes están teniendo dificultades en la inscripción y brindar información para quien pueda tener dudas, siempre en función de los planes estratégicos provinciales”, expresó en un comunicado difundido por el Ministerio de Salud de la Nación.
En este sentido, las autoridades nacionales y provinciales acordaron que para reducir los efectos de la variante Delta de la India -el más peligroso de los actuales linajes- se acortarán los intervalos a 8 semanas para las vacunas basadas en plataformas de vectores virales y a cuatro semanas para las dosis desarrolladas con virus inactivo. En otras palabras, ya no se esperará 90 días entre la primera y la segunda aplicación.
Durante la reunión virtual, el subsecretario de Estrategias Sanitarias, Juan Manuel Castelli, compartió los resultados del estudio de efectividad de las vacunas para reducir la mortalidad por COVID-19 en personas de 60 años y más, realizado por el Ministerio de Salud entre febrero y junio de este año.
El plan para rastrear casa por casa a quienes no se vacunaron comenzaría la semana que viene. Se trata de un grupo de personas que la Casa Rosada entiende no logró anotarse o no tiene acceso a un centro de Salud, aunque también dentro de ese grupo hay quienes no desean recibir ninguna dosis contra el coronavirus. Las vacunas que se utilizarán en el “rastreo” de personas son las de Sinopharm y AstraZeneca, ya que pueden conservarse a una temperatura de entre 2 y 8 grados.