El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, justificó este lunes su decisión de ausentarse del Consenso Fiscal nacional en el compromiso electoral de no aumentar impuestos, minimizó las diferencias con los gobernadores radicales dentro de Juntos por el Cambio (JXC) y ratificó la continuidad del litigio con la Casa Rosada por los fondos de la coparticipación.
“Como ya hemos dicho en reiteradas oportunidades, asumimos un compromiso central con los argentinos: no apoyar el aumento ni la creación de nuevos impuestos al trabajo y a la producción, más allá de que la realidad financiera de cada provincia lleve a firmar el Consenso Fiscal”, dijo Rodríguez Larreta en una conferencia de prensa que ofreció junto a parte de su gabinete y tras la reunión de la mesa de JXC.
En ese marco, sostuvo que junto a los tres mandatarios radicales, Rodolfo Suárez, de Mendoza; Gustavo Valdés, de Corrientes, y Gerardo Morales, de Jujuy, “hay una total coordinación” y, por ello, acordaron la negativa a incrementar las cargas tributarias en sus jurisdicciones, aunque reconoció que “ellos tienen que firmar el pacto fiscal por la realidad financiera de las provincias”.
Por otra parte, Rodríguez Larreta sostuvo que adherir al Consenso Fiscal “implicaría suspender los juicios que cada distrito tenga contra el Estado nacional, lo que afectaría directamente el reclamo de la Ciudad ante la Corte Suprema por la quita arbitraria e inconsulta de los fondos de coparticipación”.
Este lunes por la tarde, el presidente Alberto Fernández encabezó el acto de firma del Consenso Fiscal en la Casa Rosada, que contó con la presencia de los 20 gobernadores del Frente de Todos (FdT) y tres mandatarios de la oposición, a excepción del alcalde de la Ciudad de Buenos Aires.
“Celebro que hayamos logrado el consenso de 23 jurisdicciones y lamento que haya quedado sin firmar la Ciudad de Buenos Aires, porque cuando se llevaba los puntos de coparticipación lo hacía sin consensos”, planteó el Presidente durante el acto en el Museo del Bicentenario.
La explicación del alcalde porteño en torno al compromiso de no incrementar los impuestos, no obstante, fue rebatida por dirigentes de la oposición porteña que recordaron que en el Presupuesto 2021 se quitaron las eximiciones al pago de la tasa de Ingresos Brutos a las Leliq, así como se incorporó una alícuota del 1,2% a los resúmenes de las tarjetas de crédito por compras efectuadas en el distrito.
Además, destacaron que para el 2022 se esperan aumentos del 50% en la tarifa del estacionamiento medido, de un 45% en el valor de los peajes de las autopistas porteñas, y de un 51% a la Verificación Técnica Vehicular; los que se sumarán al ya vigente desde el 1 de diciembre del 30% para los viajes en taxis y que serán la antesala del incremento del pasaje del subte, que irá a $45.
La legisladora del Frente de Todos (FDT) Claudia Neira sostuvo que es “falso” que Rodríguez Larreta no suba impuestos en la Ciudad de Buenos Aires.
“La Ciudad tiene una alta presión impositiva en comparación al resto de las provincias. El principal impuesto de recaudación provincial es Ingresos Brutos y la Ciudad es el segundo distrito con más alta alícuota. Si Larreta quisiera podría bajarlo”, advirtió Neira a través de una publicación en la red social Twitter.
Juan Manuel Valdés, legislador porteño del FDT, sostuvo que el presidente Alberto Fernández “firma un nuevo consenso fiscal para 2022 junto a los gobernadores” mientras que “Larreta se niega a apoyarlo porque dice que Juntos por el Cambio tiene un compromiso de no aumentar impuestos. Su excusa no resiste el archivo ni la realidad porteña hace más de 14 años”.
“El consenso sugiere implementar un impuesto a la herencia pero cada jurisdicción decide si lo hace. Creemos que es una buena herramienta para igualar posiciones y que haya una mayor contribución de los que reciben mayor patrimonio familiar”, evaluó el diputado.
Por su parte, el legislador del FIT Gabriel Solano dijo que “miente Larreta cuando dice que no sube impuestos” y detalló que “el ABL se ajusta por inflación, lo que no ocurre con los salarios. Ingresos Brutos es altísimo y lo pagan los consumidores. Y las patentes siguen el valor de los autos que están dolarizados”.
Fuente: Télam.