Ucrania sacudió el inicio de las negociaciones de paz en Gobel con una propuesta inesperada que por ahora transcurre por “back channel”: Sumó el billonario ruso Roman Abramovich como mediador. El dueño del club de fútbol inglés Chelsea, es amigo personal de Putin y ya se encontraría en la frontera bielorusa, donde desde este lunes se encuentran reunidas las delegaciones de Ucrania y Rusia.
Abramovich tiene estrechos vínculos con las comunidades judías de Ucrania y Rusia y su presencia no fue confirmada ni negada por el embajador de Ucrania en Israel, Yevgen Kornichuk, quien sin embargo dijo dijo que “agradecemos a cualquiera que pueda ayudar, si tiene suficiente influencia”. La impactante noticia fue revelada por The Jerusalem Post. Hasta ahora, Israel ha mantenido un bajo perfil público en este conflicto, pero modernas armas israelíes fueron enviadas a Ucrania a través de Alemania y Holanda.
Abramovich venía enfrentando críticas en el Reino Unido por su relación con Putin y este domingo decidió ceder la “administración” del Chelsea a los fideicomisarios de la fundación del club.
Para contactar al billonario fue clave Alexander Rodnyansky, un exitoso productor de Hollywood que nació en Kiev, cercano al presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
Zelensky reveló que funcionarios de Ucrania se comunicaron con él y le pidieron ayuda para acceder a Abramovich, quien decidió sumarse a las negociaciones de paz.
Los ucranianos habían estado tratando de encontrar a alguien en Rusia que pudiera ayudar a encontrar una solución pacífica. Buscaron ayuda y Roman es la persona que decidió ayudar y movilizar apoyo para una resolución pacífica.
“Los ucranianos habían estado tratando de encontrar a alguien en Rusia que pudiera ayudar a encontrar una solución pacífica”, explicó Rodnyansky. “Buscaron ayuda y Roman es la persona que decidió ayudar y movilizar apoyo para una resolución pacífica”, reveló.
Rodnyansky dijo que si bien la “influencia de Abramovich es limitada”, es la única persona que conocía que accedió en Rusia a la solicitud de Ucrania. “No sé si habrá impacto, pero conocemos al personal de Zelensky y yo soy de Ucrania y están agradecidos por los esfuerzos”, dijo.
En el plano formal, las delegaciones de Ucrania y Rusia, sin la presencia de Putin ni de Zelenski, empezaron las negociaciones este lunes en una de las residencias del presidente bieloruso Alexander Lukashenko, un aliado de Moscú.
La delegación ucraniana aterrizó en Gobel en un helicóptero militar y vestida de fajina. Encabezada por el ministro de Defensa, Oleksii Réznikov, exigió una inmediata retirada de todas las tropas rusas de Ucrania, incluidas las regiones separatistas.
Desde el lado ruso prefirieron no anticipar sus demandas. “No voy a anunciar las posiciones que tenemos. Las negociaciones deben hacerse en silencio, dejemos que los negociadores se instalen”, afirmó el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Mientras las negociaciones continúan, el ejército ruso intensifica sus ataques ante una resistencia inesperada por parte de los ucranianos. “Cada hora que se prolonga el conflicto, mueren ciudadanos y soldados ucranianos. Acordamos llegar a un acuerdo, pero debe ser en interés de ambas partes”, dijo a la televisión el negociador ruso y asesor del Kremlin, Vladimir Medinsky.
Nuestro objetivo es estar junto a todos los europeos y, lo más importante, estar en pie de igualdad. Estoy seguro de que esto es justo y es lo que nos merecemos.
Las negociaciones se destrabaron este domingo luego que Putin amenazara con usar su arsenal nuclear, un presión que hoy sumó un nuevo escalón cuando se supo que Bielorusia derogó una norma que impedía el paso de armas nucleares por su territorio, en otro gesto a Moscú.
Putin ha manifestado que la posible incorporación de Ucrania a la OTAN es una amenaza a su seguridad y no lo permitirá. En medio de las negociaciones, Zelenski pareció responder a esa presión cuando este lunes solicitó a la Unión Europea que active un mecanismo de emergencia para que su país se integre al bloque, si esto ocurriera, su ingreso a la alianza militar del atlántico norte estaría mas cerca, no más lejos, como pretende el presidente ruso.
Comenzaron los trabajos de reconstrucción de los puentes sobre el Canal Maldonado, en Bahía Blanca, a casi de seis meses del temporal que hizo destrozos en la ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires. Las primeras tareas se realizaron sobre el puente de la calle Pampa Central y buscan mejorar la infraestructura vial de la zona y garantizar la seguridad de los transeúntes.
El secretario de Obras Públicas del municipio, Gustavo Trankels, presente en el lugar, destacó la rapidez en el diseño del proyecto, que se logró en solo sesenta días con la colaboración de equipos de hidráulica de la provincia y expertos locales. “Para nosotros era fundamental saber que el nuevo canal va a pasar de un promedio de 19 metros a 26 metros de ancho. Eso nos permitió definir la longitud de los nuevos puentes: este puente va a tener 28 metros de longitud y tres luces”, explicó Trankels, citado por el diario La Nueva.
El funcionario explicó que la demolición del puente no puede comenzar de inmediato, ya que es necesario reubicar servicios que se encuentran adosados a la estructura. “Por este lugar cruzan, por ejemplo, una fibra óptica que presta servicios a Chile, caños de gas, caños de agua y efluentes cloacales”, detalló. “No podemos demoler el puente hasta que esos servicios no sean relocalizados porque si no, dejaríamos sin servicio al resto de la gente”, explicó. La reubicación de estos servicios se realizará mediante la instalación de nuevos conductos por debajo del futuro canal, lo que evitará que se vean afectados por futuras obras.
Inversión de la provincia de Buenos Aires
Según consigna el sitio La Brújula 24, la obra en su totalidad contará con una inversión estimada en 109 mil millones de pesos del gobierno de la provincia. El proyecto global contempla la reconstrucción de los 6.300 metros lineales que van desde el estuario al partidor del Parque de Mayo y sus 16 puentes, con un diseño que permitirá prácticamente triplicar la capacidad de captación. (DIB) GML
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, cerrará mañana la campaña de Fuerza Patria con visitas a Merlo y Lomas de Zamora, mientras que por la tarde retomará una vieja estrategia proselitista al encabezar una charla y “mateada” con vecinos en La Plata.
El evento en La Plata será desde las 17 en la Plaza Malvinas Argentinas, con la participación del intendente local, Julio Alak, militantes y vecinos platenses.
Además, se aguardaba la presencia de los candidatos de la alianza peronista que corresponden a ese distrito: Ariel Anchaco, camporista que encabeza la lista de Fuerza Patria en la Octava Sección; Lucia Iáñez, cercana a la fuerza política del gobernador, y el massista Juan Malpeli, entre otros.
Previamente, Kicillof recorrerá Merlo y Lomas de Zamora, dos municipios importantes en el marco de la campaña por su peso en materia de electores.En tierras del intendente Gustavo Menéndez participará de la 7° Edición de la Expo de la Industria y la Producción “Hecho en Merlo, Hecho con orgullo”.
Mientras que en Lomas de Zamora, junto al jefe comunal Federico Otermín, visitará una escuela especial y compartirá una charla con la comunidad educativa de ese distrito.
Kicillof había encabezado ayer un acto de cierre en la Primera Sección en el Centro Miguelete de San Martín, donde volvió a cuestionar el modelo de la “motosierra” de Javier Milei y llamó a votar por Fuerza Patria.
Una foto tomada en el ascensor de la Superintendencia de Servicios de Salud se viralizó este miércoles en redes sociales, exponiendo un irónico chiste contra la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, en medio del escándalo por los audios de presuntas coimas.
La imagen fue difundida por el periodista Alejandro Bercovich en su cuenta de X y muestra la botonera de un ascensor del organismo público. En el lugar donde debería estar el botón del piso número 3, alguien pegó con cinta una pequeña foto de la hermana del Presidente.
La intervención es una referencia directa y mordaz al “Audiogate” y a las grabaciones atribuidas al exdirector de la ANDIS, Diego Spagnuolo, en las que se menciona el supuesto pago de un retorno del “3%” que, según la denuncia, tenía como destinataria a la propia Karina Milei.
El chiste anónimo dentro de una dependencia estatal cobra mayor relevancia en un contexto en el que el Gobierno ha iniciado una fuerte contraofensiva por el escándalo, que incluye una denuncia judicial por “operación de inteligencia ilegal” y una medida cautelar que prohíbe a los medios difundir los audios.
La imagen viral demuestra que, pese a los intentos del oficialismo por controlar la narrativa, la acusación del “3%” ya se ha instalado en el imaginario popular y ahora se manifiesta de forma creativa en los pasillos de la propia administración pública.