Pese a la tensa tregua que se declaró en la superficie, la interna entre Axel Kicillof y Cristina Kirchner volvió a sumar voltaje en las últimas horas, a raíz de dos episodios que causaron fuerte malestar en el sector que respalda al gobernador: una modificación en los plazos del cronograma electoral que se votó junto con la suspensión de las PASO y la presentación de un proyecto para eliminar el tope a la reelección de legisladores provinciales que excluye a los intendentes.
De las dos cuestiones, la más problemática parece ser la iniciativa sobre las reelecciones que, como informo DIB, fue presentada por el senador Luis Vivona, del PJ de Malvinas Argentinas, con apoyo de sus pares del camporismo y el peronismo afín, pero sin firmas del kicillofismo ni el massismo.
El proyecto modifica un aspecto muy sensible del sistema político provincial: el límite vigente a los mandados de intendentes, senadores, diputados y concejales que rige desde 2016 –con una prórroga en 2021- cuando fue votado a partir de un acuerdo de la entonces gobernadora María Eugenia Vidal con Sergio Massa, que era su aliado en la provincia. Eliminar esa restricción, que para los legisladores opera desde este año y para los alcaldes desde 2027 era un reclamo de varios sectores políticos, pero nadie hasta ahora había avanzado porque se trata de un tema impopular.
Vivona rompió esa reticencia, pero con un proyecto que tiene una particularidad: prevé la eliminación del tope de los dos mandatos para los diputados, senadores y concejales, pero la deja vigente para los intendentes. ¿Por qué? Esta es la clave del nuevo momento de tensión interna: para el kicillofismo se trata de una herramienta de presión sobre aliados clave del gobernador, aunque el kirchnerismo lo niegan.
Fuentes legislativas cercanas a Máximo Kirchner explicaron a DIB que todo tiene que ver con acompasar el régimen bonaerense con el nacional. En el Congreso, diputados y senadores no tienen restricciones para ser reelectos, pero en provincia, hoy, sí. “La idea es aplicar el mismo rigor” en ambas jurisdicciones, explicaron. Respecto de los intendentes, hablaron de la categoría de “Ejecutivo”: el presidente y el gobernador tienen limitada la posibilidad de reelección a una repetición, y para los intendentes, sostienen, debería se lo mismo.
Al menos dos altas fuentes del kicillofismo rechazaron de plano la idea en diálogo con DIB. “Están presionando a los intendentes de cara a la discusión por las listas”, acusaron. El grupo que respalda al gobernador sostiene que como entre 40 y 44 los alcaldes que están alineados con ellos, muchos de los cuales no tienen posibilidad de reelegir con el régimen actual, la intención del camporismo fue dar una señal para que no prioricen esa cuestión y no disputen en el armado electoral.
En contraste, en la Legislatura, Cristina pone en juego 15 bancas de diputados y senadores que le responden; Kicillof, solo siete. También, son más los legisladores alineados con ella que están impedidos de volver a presentarse por el límite de dos mandatos que rige en la provincia y se beneficiarían con la eliminación de las restricciones.
La otra cuestión que causó tensión es la exclusión de un artículo que extendía los plazos del cronograma electoral en la ley que suspendió las PASO, aprobada en Senadores el martes con respaldo de la oposición.
En gobernación creen que fue un gesto para dejar en claro que solo aprobaron aquello que, con críticas y a regañadientes, Cristina Kirchner aceptó apoyar (suspener las PASO y con ello facilitar el desdoblamiento) pero a la vez complicar todo lo posible la realización de la elección con el formato que escogió Kicillof.
En ese marco, fuentes del Movimiento Derecho al Futuro señalaron que la exclusión del artículo sobre los plazos se opuso incluso a un pedido que horas antes había cursado la Junta Electoral de la provincia, en una carta remitida a la presidencia del Senado. (DIB) AL