Conecta con nosotros

Destacado

El oficialismo empieza a instalar la reelección: mezcla ambiciones y necesidades políticas

Publicado

en

El Gobierno tiene puesto el foco en su plan legislativo, que no arrancó como esperaba -sobre todo por costos autogenerados-, pero marca el clima político en medio de las fiestas de fin de año y se proyecta como principal renglón del temario de verano. Así y todo, el oficialismo se dio tiempo para repetir un clásico de la política cuando un presidente encara la segunda mitad de su mandato: se trata de instalar el tema de la reelección. Es un movimiento que mezcla ambiciones y necesidades. Y en el caso de Javier Milei, con particularidades propias, como acaba de ocurrir en el Congreso.

La primera señal estuvo a cargo de Karina Milei, en el momento de mayor entusiasmo poselectoral y en el territorio elegido, por peso propio, para estrenar el término reelección en el discurso violeta. Lo planteó como consigna en la provincia de Buenos Aires, afirmada como principal armadora política del oficialismo, después de que la lista de LLA revirtiera en el turno nacional de octubre la amargura de la derrota en la elección provincial de septiembre.

Karina Milei lo dijo sin vueltas: el principal proyecto es la reelección. Después, circularon versiones -algunas disparatadas- sobre los planes del Gobierno, pero quedó en claro que la apuesta a la aprobación de las “reformas estructurales” juega en el mismo paño, para darle aire definitivo al objetivo mayor. En tren de acelerar los pasos en el Congreso, surgieron síntomas de confusión sobre el impacto práctico de las elecciones. Se esperó un resultado de arrastre mecánico con el fortalecimiento de sus bancas y las negociaciones se concentraron casi exclusivamente en los gobernadores, convertidos en la llave para los acuerdos legislativos frente al cuadro de fragmentación y crisis de partidos y coaliciones.

El mensaje de Olivos con sus proyectos -especialmente, la ahora demorada reforma laboral- está orientado a los mercados y al frente externo. No es un dato menor como señal de concepción política y económica. Y en el mismos sentido opera el objetivo reeleccionista.

En ese cuadro, se mezclan entonces cuestiones políticas de siempre y trazos propios. Y los dos pintan el ideal de un “mileismo” sino eterno, al menos muy duradero. Y fuera del deseo político, asoman las necesidades. En primer lugar, mantener la expectativa social, es decir, instalar la idea de continuidad. También, reafirmar la condición de único líder del espacio y candidato sin discusión para el 2027, como mensaje a la interna y a los socios.

El objetivo escaló incluso a la categoría de imaginario en ámbitos de segunda línea violeta, que sobreactúa alineamiento con Karina Milei. Ya no se trataría de emparentar la experiencia libertaria con el menemismo, sino de mirarse en el espejo del kirchnerismo originario, cuando Néstor Kirchner era celebrado por la jugada “estratégica” resumida en el impulso a CFK como presidenta para alternarse en el poder, sin límites.

Lo que quedó a la vista en estas horas es que la línea reeleccionista es impulsada en primer lugar desde el círculo de la secretaría General de la Presidencia. El mensaje fue retomado por Martín Menem en las últimas horas. “Ya estamos en marcha, trabajando por la reelección”, dijo el presidente de la Cámara de Diputados, que viene de días complicados en este breve tramo inicial de sesiones extraordinarias. Otro que abordó el tema, pero ante una pregunta concreta, fue Diego Santilli. Amagó con dar una vuelta con aquello de que “no es el momento” para hablar del tema, pero redondeó diciendo que le gustaría. Dejó otro concepto nada nuevo pero útil para el discurso: el planteo sobre la imposibilidad de consolidar un rumbo en sólo cuatro años de gestión.

Milei, también esta semana, dejó abierta esa puerta en una entrevista. No rechazó hablar del tema y lo manejó como indica la fórmula tradicional: remitió su futuro a lo que “la gente quiera”. Sería apenas una frase de ocasión, ineludible frente a una consulta concreta, sino fuera porque el tema empieza a ser colocado en el temario, alimentado por las declaraciones referidas y la conveniente circulación de encuestas.

Todos los movimientos están teñidos por las disputas internas, de momento contenidas pero no saldadas, como fue notorio en el traspié sufrido en Diputados con artículos gravitantes del Presupuesto, que resultaron forzados, insostenibles desde el primer minuto y sepultados en el recinto. La caída de la emergencia en el área de discapacidad y el financiamiento universitario puso en crisis la relación tejida con gobernadores y precipitó la decisión de postergar la reforma laboral hasta febrero. Los malestares domésticos superan la interna del ala “política” y alcanzan, según el caso, a Luis Caputo y Federico Sturzenegger.

De todos modos, Milei cuida los gestos. Karina Milei es claramente número uno, por encima del resto del círculo de Olivos, y a pesar del esmerilamiento sufrido, Santiago Caputo ratificó sus líneas en áreas sensibles como los servicios de inteligencia y ARCA. Algunas de las últimas declaraciones presidenciales fueron destinadas a respaldar el ascenso de Andrés Vázquez en el organismo impositivo.

Fue un dato fuerte, aunque poco ruidoso. Casi en el mismo registro quedó el aval al acuerdo con el peronismo/kirchnerismo para repartirse los sillones de diputados en la AGN. Milei rechazó que haya sido un pacto y prefirió hablar de una expresión de “la lógica de la política”. Esa movida en el organismo de control alimentó de inmediato especulaciones sobre tratativas para designar integrantes de la Corte y jueces federales.

La instalación del proyecto reeleccionista es un proceso. Está atado a la marcha de la gestión, con la economía como prueba central, pero también pueden influir manejos y operaciones políticas como los que sacudieron al Congreso cuando todo parecía un camino sin sobresaltos para Olivos.

Advertisement

Destacado

Bullrich evita la interna de la AGN en el Senado y pide centrarse en la aprobación del Presupuesto

Publicado

en

Patricia Bullrich quiere ganar. Pidió que la Reforma Laboral entrara por el Senado en busca de un rutilante triunfo parlamentario y terminó pasando el tema a febrero porque no contaba con los votos para aprobarlo. Sintió que en esa discusión perdió y mañana, en la sesión por el Presupuesto 2026, quiere ganar como sea, por lo que ya avisó que no va a autorizar la intromisión de ningún tema. El aviso que le hizo llegar a propios y ajenos tiene que ver con la posibilidad de que se vayan introduciendo temas a lo que será su primera sesión como presidenta del bloque de La Libertad Avanza.

“Lo único por afuera es la jura de Fullone, nada más”, dijo un senador libertario en referencia a la asunción del legislador de Río Negro Enzo Fullone en lugar de Lorena Villaverde que va a completar el bloque con 22 senadores. Pero también lo dijo frente a la posibilidad de que a alguno se le ocurra meter por la ventana la posibilidad de nombrar a los Auditores Generales designados a propuesta de la Cámara de Senadores como sucedió en Diputados. En la Cámara alta hay nombres que suenan para ocupar esos tres cargos, pero, al igual que lo que sucedió en Diputados, hay más nombres que sillas para ocupar.

La designación es por representatividad, pero, principalmente, por acuerdo político, ya que tiene que ser votado por el recinto. La designación de Pamela Calletti por la Cámara baja es un ejemplo de eso ya que fue a propuesta de un bloque minoritario pero con el apoyo de los dos bloques mayoritarios -LLA y Unión por la Patria. También es un antecedente para el Senado para los radicales y macristas, que siguen de cerca las conversaciones entre los bloques que responden a los gobernadores. En ese esquema el único que tiene asegurada una silla es el peronismo porque sin sus votos el resto no llega. El nombre que propone el bloque es, al igual que lo que sucedió en Diputados, es el de Javier Fernández, dándole continuidad al auditor del PJ que ya estaba en la AGN.

El problema se genera porque ahora LLA tiene número para imponer una segunda candidatura y quedaría una sola silla para repartir entre la UCR, el PRO y los bloques minoritarios que representan a los gobernadores. “Quedó todo muy sensible por lo de Diputados, el radicalismo tiene más número que el PRO para imponer al tercero, pero los macristas están exigiendo una compensación, es algo muy difícil de acordar porque aunque si tenés al peronismo y al radicalismo no necesitas de sus votos para nombrarlos, necesitamos de ellos para todo lo demás”.

El radicalismo, con 10 votos, es quien tiene más posibilidad de imponer a un candidato. Los nombres que maneja el bloque son los de dos exsenadores: Luis Naidenoff y Victor Zimmermann. El esposo de Carolina Losada es quien tiene más apoyo de la Casa Rosada. La preocupación en el oficialismo está puesta en la aprobación del Presupuesto y en los ruidos que está generando el articulado que representa un ajuste en la educación y la ciencia. El peronismo buscará jugar fuerte en el momento en el que se debata el articulado porque entiende que Bullrich tiene cerrados los acuerdos para la votación en general.

Mañana a las 12 debutará Patricia Bullrich como jefa del bloque de La Libertad Avanza en el Senado de la Nación, un recinto que en los últimos dos años al oficialismo le costó hacer pie, y buscará un éxito tanto en la aprobación del Presupuesto como de la ley de modificación del Régimen Penal Tributario, el resto de los temas puede esperar.

Continue leyendo

Destacado

El Gobierno insistirá en aplicar cambios a la Ley de Salud Mental durante la sesiones ordinarias

Publicado

en

En paralelo a las reformas que el presidente Javier Milei aspira a pasar en sesiones extraordinarias, el Gobierno Nacional diseña la hoja de ruta legislativa para el 2026 que incluye la determinación de implementar cambios en la actual Ley de Salud Mental, lo que -argumentan- atendería un reclamo clave que las familias de pacientes, profesionales y de las Fuerzas de Seguridad. Según supo Infobae de una importante fuente del Poder Ejecutivo, la idea es enviar un proyecto que contemple la modificación de algunos puntos de la ley durante el período de sesiones ordinarias, que inicia el 1° de marzo, en especial sobre el artículo que habilita las internaciones involuntarias para que, en determinados casos, los jueces puedan autorizar la hospitalización.

Se trata de un pedido que mayormente levantaron los familiares desde la sanción de la Ley N° 26.657 de Salud Mental y Adicciones, que fue promulgada en diciembre de 2010 y reglamentada en 2013, pero que desde su puesta a punto generó polémica por su aplicación. Lo cierto es que el espíritu original de antimanicomialización, que busca preservar los derechos de los pacientes en el sistema de salud, encontró limitaciones en la práctica ante la ausencia de dispositivos necesarios para su correcta aplicación.

A raíz de esa situación, desde el Poder Ejecutivo tienen intenciones de insistir, a través del Ministerio de Salud que comanda Mario Lugones, en los cambios para avanzar en la creación de centros especializados y en la posibilidad de autorizar la internación de determinados pacientes a través de la intervención judicial.

No es la primera vez que la administración libertaria intenta implementar estas modificaciones que estuvieron contempladas en el proyecto original de la Ley Bases, pero que finalmente quedaron afuera de la sanción definitiva de la que supo ser presentada como la megaley.

“Hay que volver atrás y recuperar cosas que funcionaban de la ley anterior”, sintetizaron importantes fuentes oficiales a este medio, luego de haber ensayado -sin éxito- cambios en al menos ocho artículos. Si bien aún se encuentra en plena redacción, el proyecto podría ser anunciado por el mandatario durante la Apertura de Sesiones en el Congreso a principios de marzo.

Las modificaciones aspiraban a habilitar a jueces a adoptar medidas de atención urgente; definían cuatro casos específicos para la internación, planteada como recurso terapéutico excepcional; daba luz verde a la creación de neuropsiquiátricos; dotaba a al defensor de solicitar medidas terapéuticas; planteaba un esquema de modificación en las condiciones de egresos y rehabilitación de los pacientes; y modificaba la composición del Órgano de Revisión.

Los equipos en la tarea trabajan en los detalles, pero, según anticiparon fuentes al tanto del diseño, repetirán algunos de los puntos mencionados que buscaban ser incluidos en la mal llamada Ley Ómnibus de aquel entonces. Los cambios planteados abrieron una polémica mayormente entre activistas del sector, que leyeron las propuestas como una profundización de la manicomialización que buscan combatir.

Sin embargo, por estos días, la Casa Rosada contraargumenta con ejemplos de casos de complejo desenlace como el episodio que terminó con la vida del efectivo de la Policía Federal, Juan Pablo Roldán, que fue asesinado por un hombre identificado como Rodrigo Facundo Roza, que lo apuñaló con un cuchillo en la zona aledaña al MALBA. El psiquiatra del homicida, Jorge Alberto Monforte, fue llevado a juicio por presunto abandono de persona y homicidio culposo y finalmente fue absuelto.

Otra de las claves que fomentaron la determinación de insistir en cambiar el articulado de la ley reside en el testimonio de Marina Charpentier, la mamá del reconocido músico Chano Moreno Charpentier, quien expuso en el Congreso de la Nación la necesidad de aclarar algunas definiciones difusas vigentes y la falta de herramientas para contener situaciones de brotes y episodios agudos a raíz de trastornos mentales y adicciones. “La Ley Nacional de Salud Mental fue creada en 2010 sin la consulta de psiquiatras ni universidades. No aborda la realidad de las familias que sufren estas enfermedades”, supo contraargumetnar.

A principios de año, la activista y madre del cantante de Tan Biónica cargó contra el Gobierno Nacional al calificar el Presupuesto, prorrogado desde 2023, destinado a salud mental como “un chiste”. “Solo se destina un 10% del presupuesto de salud, y eso cuando hay suerte”, sostuvo en una entrevista a este medio.

Continue leyendo

Destacado

La Legislatura porteña, modelo 2026: el rol de Larreta y la discusión que pondrá en juego el vínculo del PRO y LLA

Publicado

en

La nueva Legislatura tendrá, más temprano que tarde, una instancia de discusión que marcará el pulso de la política porteña en 2026, año clave para las aspiraciones del jefe de Gobierno, Jorge Macri, de buscar su reelección en 2027. En febrero se deberán definir las presidencias de las comisiones, votación que se abre tras haber superado la aprobación del Presupuesto local y la definición de las autoridades, y que pondrá en juego la solidez del “pacto de no agresión” que suscribieron el PRO y LLA.

Desde la bancada libertaria, que preside Pilar Ramírez, ya adelantaron que pedirán la presidencia en varias comisiones clave, que podrían ser Hacienda, Planeamiento, Seguridad, Asuntos Constitucionales o Justicia, entre otras. Esto podría tensar el vínculo con el PRO, en sintonía con la discusión nacional que tuvo lugar la semana pasada en el Congreso, cuando la designación de integrantes de la Auditoría General de la Nación (AGN) provocó un fuerte comunicado del partido amarillo y una réplica del presidente del bloque, Cristian Ritondo.

La relación está rota. Les va a costar mucho volver a ganarse nuestra confianza. Hace dos años los ayudamos desinteresadamente y ahora acuerdan con el kirchnerismo”, aseguraron en aquel momento desde la jefatura del bloque, en relación a la designación como auditores a Mónica Almada, por La Libertad Avanza; Juan Forlón, por el kirchnerismo; y Pamela Calletti, aliada del gobernador salteño, Gustavo Sáenz.

El propio Mauricio Macri siguió de cerca las alternativas de aquella sesión en Diputados. En algún momento, el líder del PRO pensó en Jorge Triaca para ocupar un lugar en la AGN; desde el entorno del expresidente, y ante la consulta de Infobae, también hablaron de una “relación que está rota”, y responsabilizaron al presidente de Diputados, Martín Menem, y al asesor presidencial Eduardo Lule Menem, de “haber pactado con los gobernadores del norte y haber cerrado filas con el kirchnerismo”.

Volvemos a la Ciudad de Buenos Aires. Cerca de Jorge Macri hay confianza para el segundo tramo de la gestión, y hablan de un bloque legislativo “más ordenado” y “más fuerte, que pasó de siete a 11 integrantes, y a eso tenés que contar que llegaron personas con mucho señority, como Waldo Wolff, Laura Alonso o la misma Silvia Lospennato”. Se convertirán en el trío de voceros del oficialismo.

En cuanto a la relación con LLA, será fluctuante, como sucede a nivel nacional. Jorge Macri sabe que su futuro está atado a la suerte de Javier Milei. Si el Presidente mantiene el nivel de popularidad que le permitió imponerse en las legislativas, y si mantiene controlado el dólar y la inflación, eso se va a trasladar al candidato que impulse LLA y la competencia con el PRO por el electorado común será más compleja. Es una carrera en la que ya está anotada la senadora Patricia Bullrich. En este escenario, varios dirigentes macristas no ven con malos ojos participar de una PASO de todo el espacio de la centro derecha.

Pero la relación con La Libertad Avanza puede descomponerse. En ese caso, aseguran, “el diferencial es la gestión y hacer que la ciudad funcione”. Y minimizan las aspiraciones de Horacio Rodríguez Larreta, que ya aseguró que buscará ser jefe de Gobierno porteño de nuevo. “El centro ya no existe en la ciudad; los espacios centristas se diluyeron. Estas elecciones mostraron que el centro-derecha es el sector predominante, y el PRO debe competir o pactar ahí”, sostuvo un importante dirigente porteño.

A nivel parlamentario, Larreta logró conformar un bloque de siete integrantes, una cifra importante para el oficialismo si rompe con LLA, porque necesitará esos votos, y los del peronismo, para poder aprobar las leyes. Por eso, también será clave la dinámica de reparto de comisiones con el bloque que preside Claudia Neira, la primera minoría con 20 integrantes, que tiene ahora como referente a Leandro Santoro y que conduce Juan Manuel Olmos, histórico dirigente del PJ porteño.

Otra particularidad de la nueva Legislatura. El influyente empresario y ex presidente de Boca, Daniel Angelici, logró quedarse con la secretaría administrativa, un cargo clave porque maneja el presupuesto del Parlamento, ahora a cargo de Cristián Gribaudo. La conducción política sigue en manos de Matías López, un joven dirigente cercano a Diego Santilli y bien considerado por todos los bloques. También habrá cambios en la Dirección de Prensa.

Continue leyendo
Advertisement

Trending