Tras cuatro meses sin actividad, el Senado volvió a sesionar este jueves, pero la jornada se frustró rápidamente en medio de cuestionamientos de Juntos por el Cambio al oficialismo por la supuesta pretensión de querer imponer un “temario antirreglamentario”.
Con la presencia de 70 legisladores, la Cámara alta pudo retomar su actividad pasado el mediodía. El debate se calentó cuando la presidencia del cuerpo, a cargo de la oficialista Claudia Ledesma, exigió una mayoría calificada para aprobar el cambio de orden del temario que había pedido unos minutos antes la oposición.
En medio de esa discusión, los integrantes de Juntos por el Cambio tomaron la decisión de retirarse del recinto, al igual que los miembros del peronismo disidente agrupado en Unidad Federal.
Luego de que la salida de la oposición, el oficialismo se quedó en sus bancas y sesionó en minoría con críticas a la actitud de JxC.
“Venir acá a pedir la votación del cambio, alterar el plan de labor, violando el reglamento, la decisión que ha tomado la Presidencia, demuestra que es todo una farsa y que no les importa nada lo que está pasando en Santa Fe, ni alcohol cero”, lanzó el jefe del bloque del Frente Nacional y Popular, José Mayans.
“Quedó de manifiesto que cuando Cristina Kirchner y el FdT pierde la mayoría en el Senado, la pudre, como se dice popularmente. Lo que hicieron fue querer tratar los temas que se les da la gana y no los que había pedido el bloque de Unidad Federal y el de Juntos por el Cambio, que eran concordantes exceptuando un solo tema”, se quejó Alfredo Cornejo fuera del recinto.
En el temario de la sesión estaban incluidos los proyectos de Alcohol cero y la Ley Lucio. El primero establece tolerancia cero en alcohol para conductores de automóviles en todo el país. El segundo es una ley que se construyó en base al asesinato del niño Lucio Dupuy a manos de su madre y la pareja de ésta, con el objetivo de que los resortes estatales puedan detectar situaciones de peligro para las infancias.
Fuente: NA