La conflictividad laboral con paro se desplomó un 10% en un año: es la cifra más baja del año, impulsada por la fuerte caída en el sector privado.
Un informe de la Secretaría de Trabajo, dependiente del Ministerio de Capital Humano, reveló una significativa disminución en los conflictos laborales que incluyeron cese de actividades entre 2024 y 2025, consolidando una tendencia a la baja que, según el Gobierno, responde a un “camino de maduración e institucionalidad” en las relaciones laborales.
Junio de 2025 cerró con apenas 46 conflictos laborales con paro, lo que representa la cifra más baja del año. Este número implica una caída del 10% respecto a junio de 2024 y un descenso aún más pronunciado del 22% en comparación con el mes anterior, mayo de 2025.
La reducción no solo se observa en la cantidad de conflictos, sino también en el volumen de trabajadores involucrados y en las jornadas no trabajadas.
Descenso generalizado
Los datos difundidos por la Secretaría de Trabajo son contundentes y reflejan una disminución en todos los indicadores clave de conflictividad con paro:
–Cantidad de huelguistas: Alcanzó los 249.709, lo que supone un descenso del 34% interanual y una caída del 61% respecto a mayo de 2025.
–Jornadas individuales no trabajadas: El total fue de 338.721, registrando una baja del 28% frente a junio de 2024 y del 57% en relación a mayo de 2025.
Estas cifras evidencian una marcada disparidad entre los sectores público y privado, que explican la dinámica general de la conflictividad.
El sector privado lidera la baja, el público concentra la conflictividad restante
El análisis sectorial del informe oficial subraya una diferencia crucial en el comportamiento de los conflictos:
–Sector privado: Experimentó una disminución mucho más pronunciada en todos los indicadores. La cantidad de huelguistas en empresas privadas se redujo en un impresionante 94%, las jornadas no trabajadas bajaron un 73%, y los conflictos con paro retrocedieron un 44%.
–Sector público: En contraste, mostró una dinámica menos pronunciada. Si bien hubo un descenso moderado en la cantidad de huelguistas (-1%) y jornadas no trabajadas (-15%), se produjo un crecimiento del 6% en la cantidad de conflictos con paro entre junio de 2024 y junio de 2025.
Esta disparidad es la que explica el aumento de la participación del ámbito estatal en el total de conflictos, que pasó del 67% en junio de 2024 al 78% en junio de 2025. La drástica reducción de conflictos en el sector privado amplificó el peso relativo del sector público en la estadística general.
La visión del Gobierno
Desde el entorno del secretario de Trabajo, Julio Cordero, atribuyen la baja de la conflictividad laboral a “un camino de maduración e institucionalidad” por parte del sindicalismo, el empresariado y los funcionarios.
Se destaca que en el Ministerio de Capital Humano se prioriza el “diálogo tripartito”, donde el Estado actúa como un componedor para facilitar acuerdos entre las partes.
Según la Secretaría de Trabajo, lo que se observa es una “caída de la conflictividad laboral con paro como un proceso no coyuntural, sino como una tendencia que se viene profundizando con esta gestión”.
Además, se señala un cambio en el enfoque de los sindicatos, que antes se centraban casi exclusivamente en aumentos salariales, y hoy también consideran la estabilidad laboral y la realidad particular de cada actividad.
Causas y sectores más afectados
En cuanto a los motivos de los paros en junio de 2025, los reclamos por mejoras salariales fueron la principal causa, explicando 27 de los 46 conflictos. Le siguieron las demandas por pagos adeudados, con 6 conflictos.
Es notable la disminución de los conflictos vinculados a despidos, que pasaron de 9 en junio de 2024 a solo 3 en junio de 2025, representando el 7% del total.
El informe también detalla los sectores de actividad con mayor conflictividad:
–El 89% de los conflictos con paro se registraron en la administración pública (13 casos), la enseñanza (13 casos), la salud (10 casos) y la industria manufacturera (6 casos).
–Aunque su participación absoluta y relativa descendió (del 39% al 28%), la administración pública sigue siendo el sector con mayor nivel de conflictividad.
–Se observa un aumento de la conflictividad en las ramas de la enseñanza y la salud, que registraron el 28% y 21% del total de conflictos respectivamente en junio de 2025.
–En contraste, el sector de transporte y almacenamiento mostró un fuerte descenso, pasando de representar el 20% de los conflictos en mayo de 2024 a solo el 4% en junio de 2025.
Geográficamente, la mayor cantidad de conflictos durante junio de 2025 se produjeron en las provincias de Buenos Aires (10), Entre Ríos (4), Jujuy (4) y Santa Cruz (4).
Se destaca el crecimiento de conflictos en Buenos Aires y Entre Ríos, que se duplicaron respecto a junio de 2024, mientras que provincias como Catamarca, Corrientes, Chaco, San Juan, Tucumán y Tierra del Fuego no registraron conflictos.
Movilizaciones sin paro en aumento
El informe también brindó datos sobre la conflictividad laboral sin paro, que registró un aumento del 48% respecto a junio de 2024, con un total de 117 conflictos en junio de 2025.
Las acciones más frecuentes fueron las concentraciones (43), movilizaciones (23) y declaraciones organizativas (21). Las concentraciones se mantuvieron como la acción más común, y se observó un crecimiento sostenido de las movilizaciones y las ocupaciones.
Los principales motivos de estos conflictos sin paro fueron las mejoras salariales (45), seguidos por despidos o no renovación contractual (23), pagos adeudados (19) y otros reclamos, incluyendo el rechazo a políticas gubernamentales (17).
La mayoría de estos conflictos se canalizaron a través de medidas de acción directa, como concentraciones y movilizaciones.
En síntesis, los datos de la Secretaría de Trabajo muestran un panorama de reducción sustancial en la conflictividad laboral con paros, especialmente marcada en el sector privado, y una reconfiguración de la dinámica de los conflictos hacia el sector público y hacia formas de protesta que no implican el cese total de actividades.
Fuente: La Nueva.